viernes, 15 de enero de 2010
FRAGMENTO DEL LIBRO:LA RESURRECCION DEL INVISIBLE POETA
Escrito por: miguel angel luna míreles
Fragmento:
Antes de entrar a su automóvil y partir de vuelta a casa hecho un último vistazo a la barranca Que entre las penumbras se perdía; la luna en el oriente se avisaba y el sol en el poniente Se perdió, unos llegan y otros se van, lo mismo sucerá conmigo en la empresa (haciendo alusión
Con lo que en el cielo sucedía) no soy insustituible, aunque el sol si lo es……..quizá no fue una buena analogía…en fin. (Se dijo un poco contrariado dibujando una ligera sonrisa al tiempo que abría la puerta de su automóvil) busco en la radio música que se adaptara a las emociones que sentía y con música de PINK FLOYD manejo de vuelta a la gran ciudad.
Al llegar a la urbe el tráfico era impenetrable, al parecer un kilometro adelante se había suscitado un accidente fatal, provocando el cierre de los carriles laterales creando un cuello de botella ,el estrés se palpaba en el ambiente y las miradas de los conductores, que no dejaban de presionar el claxon agitando las manos fuera de las ventanillas, ¡que se me termina la gasolina inconscientes! gritaba enfurecido un hombre con camioneta roja de reciente modelo,
Que no hay autoridad que nos ampare? (dijo una señora de cierta edad, mientras hablaba por celular) ¡es el colmo lunes sin sexo! (dijo un joven conductor apretando los labios) será posible tal escenario? La principal arteria de la ciudad bloqueada? ya rebasamos los congestionamientos ahora sufrimos de colesterol vial. (Dijo angel con sarcasmo mientras densamente se movía el tráfico al son de las mentadas y la monotonía.
Al llegar al sitio del accidente se sorprendió al ver el vehículo siniestrado, un Lincoln negro igual al suyo) pobre infeliz, ¿Quién será? (las luces centelleantes de las sirenas de transito y ambulancias, le impidieron ver el rostro de la persona muerta) que triste fallecer así (pensó). En el trayecto se entero por los comentarios de los conductores que la persona venia alcoholizada y a exceso de velocidad.
La fugaz felicidad que sentía por el encuentro con la naturaleza, se perdió debajo del vaporoso asfalto y una sensación de incertidumbre y desasosiego se apodero de él profundamente impactado por el trágico evento, en silencio y sin música se siguió cauteloso hasta su apartamento evitando las avenidas de alta velocidad.
Fagmento.
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que onda con el muertito hermano me dejaste picado jajajaja,,,saludos---
ResponderEliminararturo